De izquierda a derecha, Mike Krack, Dan Fallows y Tom McCullough.
La temporada 2023 de Aston Martin está siendo sumamente irregular. Esto obliga a los dirigentes del equipo reflexionar sobre las causas que han propiciado que un coche tan prometedor como el AMR23 haya terminado ofreciendo resultados tan dispares.
Cuando termine el Gran Premio de Sao Paulo que se disputa este domingo a partir de las 18:00 horas, sólo quedarán dos más para finalizar la temporada 2023 de Fórmula 1. Y el balance final de Aston Martin no podrá ser bueno, por mucho que el equipo de Fernando Alonso y Lance Stroll haya sumado al menos siete podios y alrededor de 200 puntos más que en 2022.
¿Por qué? En primer lugar, porque Aston Martin no ha sido capaz de desarrollar el AMR23 de manera positiva, viviendo sus mejores momentos al inicio de la campaña y cayendo progresivamente en la tabla hasta sufrir incluso por sumar puntos en algunas carreras.
«Estábamos bastante seguros de que, durante el invierno, habíamos creado un coche realmente bueno»
Además, otros equipos han mejorado notablemente su rendimiento a lo largo del año, propiciando que Aston Martin vaya a acabar quinto en la clasificación de constructores. Un resultado que, teniendo en cuenta que a mitad de año era muy factible optar al subcampeonato, resulta decepcionante.
Aston Martin hace autocrítica
A lo largo del año, Aston Martin ha pecado de optimista y se ha marcado objetivos que en realidad no eran factibles. Pero eso no impide a sus miembros hacer autocrítica en esta fase final de la temporada.
Tom McCullough es un ejemplo de ello, pues ha analizado la situación actual de Aston Martin durante su comparecencia ante los medios en Interlagos.
En ella, el director de rendimiento de Aston Martin ha admitido que todos en el equipo están «un poco decepcionados con parte del rendimiento de final de año», aunque no ha perdido la ocasión de puntualizar: «Como equipo estamos creciendo, estamos creciendo realmente rápido y eso nunca está libre de dolor».
El traslado al Campus Tecnológico de Silverstone
No en vano, Aston Martin está inmerso en pleno proceso de crecimiento a todos los niveles. No sólo a nivel deportivo, sino también humano y tecnológico. Esto se proyecta a la perfección en la llegada de cientos de nuevos miembros y el nuevo Campus, una instalación de 37.000 metros cuadrados que dispone de tres edificios, de los cuales sólo el primero ya ha sido terminado.
«Siempre lleva un tiempo empezar a trabajar con gente nueva. También, cuando nos mudamos inicialmente a la nueva fábrica, sólo nos mudamos al piso de arriba, el piso de abajo aún estaba en construcción. Ahora, la construcción del (edificio) 1 está totalmente terminada», explica Tom McCullough en un intento de hacer entender a prensa y afición la complejidad de este proceso.
«La construcción 3, el nuevo túnel de viento, está progresando muy bien, y ahora también han comenzado a construir el 2. Es decir, estamos en una fase de gran crecimiento y nos enfrentamos a algunos de los mejores equipos», amplía el ingeniero británico.
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Tom McCullough también hace referencia a la competencia. Equipos como Red Bull y Mercedes, que desde 2010 han acaparado todos los títulos en juego.
«Los nueve equipos contra los que luchamos son los mejores. Estamos tratando de luchar contra los que están en la cima», recuerda el británico. ¿Hemos evolucionado tan bien como ellos durante el año? No. ¿Estamos un poco decepcionados con eso? Sí. Pero creo que el aprendizaje y la forma en que el equipo está creciendo es realmente positivo para el futuro».
La conclusión a la que llega McCullough es que Aston Martin ha cometido errores en unas circunstancias que no son las ideales. Y que estos errores permitirán al equipo evolucionar y convertirse en una organización eficaz y competitiva.
«Estábamos bastante seguros de que, durante el invierno, utilizando nuestras herramientas de desarrollo, habíamos creado un coche realmente bueno. Empezamos fuerte. Hicimos algunas cosas que, en retrospectiva, no haríamos, pero eso es ingeniería. Creo que el aprendizaje ha sido clave», concluye. ¿Será suficiente para ganar a los todopoderosos de la parrilla?
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Fuente : https://www.motor.es